Finalizó hoy un juicio oral y público celebrado en el marco de una causa por abuso sexual, promoción y facilitación de la prostitución en perjuicio de una menor de edad, y en el que se encontraban imputados un agricultor de Alberdi, la madre y el padrastro de la víctima.
Luego de siete jornadas de debate, un tribunal resolvió declarar a los dos hombres culpables de los delitos imputados oportunamente por la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual del Centro Judicial Concepción, a cargo de Héctor Fabián Assad.
La investigación se inició con una denuncia realizada en enero de 2020 por el hermano de la menor abusada. El joven, que vive en otra provincia, había estado de visita en la casa de su madre cuando su hermana le contó acerca de los hechos aberrantes. Según los relatos de la víctima, ratificados en cámara gesell, entre diciembre de 2019 y enero de 2020 su madre y su padrastro la obligaron a tener relaciones sexuales a cambio de dinero y bienes con el patrón de ambos. Fuentes del caso informaron que durante la investigación la menor también confesó que entre 2013 y 2014 había sido violada por su padrastro, razón por la cual esos delitos fueron incluidos en la causa.
La sentencia
La lectura de la sentencia tuvo lugar en la tarde de hoy. Luego de valorar las pruebas presentadas por la fiscalía, entre las que figuran la declaración de una decena de testigos así como también más de 20 informes de peritos médicos y psicológicos, los jueces consideraron que los elementos colectados por el MPF fueron suficientes para tener por acreditada la materialidad del hecho investigado y la autoría del agricultor y de su peón.
El tribunal resolvió hacer lugar a los planteos realizados por el fiscal Assad y condenar al finquero a 10 años de prisión por ser hallado culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal reiterado en tres oportunidades.
El padrastro de la víctima fue condenado a 14 años de prisión por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la situación de convivencia en dos oportunidades y de abuso sexual con acceso carnal en calidad de partícipe necesario respecto de los abusos perpetrados por su empleador.
Con respecto a la madre de la menor, esta fue absuelta del delito de partícipe necesario del que estaba incriminada.